JUANA DE IBARBOUROU

Juana Fernández Morales (Melo, 8 de marzo de 1892 - Montevideo, 15 de julio de 1979)

Se hizo conocida como Juana de Ibarbourou, tomando el apellido de su marido, el capitán Lucas Ibarbourou, con quien se casó a los veinte años. Su padre era español, gallego, nacido en Lourenzá (Lugo) —cuya biblioteca municipal lleva el nombre de la poetisa— y su madre pertenecía a una de las familias españolas más antiguas del Uruguay.

Alcanzó una gran popularidad en el ámbito hispanohablante por sus primeras colecciones de poemas. Fue elegida miembro de la Academia uruguaya en 1947, y en 1959 le fue concedido el Premio Nacional de Literatura, otorgado ese año por primera vez. Sus obras están marcadas por el modernismo y, temáticamente, exaltan la maternidad, la belleza física, el erotismo y la naturaleza, con cierto lastre retórico. Vivió en Tacuarembó en el año 1937, durante un período de 6 meses, a invitación del pueblo local.

Sus tres primeros libros, de estilo modernista, fueron el poemario Las lenguas de diamante (1919), la colección de prosa poética El cántaro fresco (1920) y el poemario Raíz salvaje (1922). Tuvieron repercusión internacional y fueron traducidos a varias lenguas.

La originalidad de su estilo consistió en unir el rico cromatismo con imágenes modernistas, dándole un sentido optimista de la vida, con un lenguaje sencillo, sin complejidades conceptuales, que redunda en una expresividad fresca y natural. A partir de entonces, publicó más de treinta libros, la mayoría de los cuales fueron colecciones de poesía, aunque escribió también memorias de su infancia, como Chico Carlo (1944), y un libro para niños (ver Obras). Su amplia popularidad la hizo merecedora del sobrenombre de Juana de América, con el que se le rindió un homenaje oficial en 1929. Por su parte, ella se declaró “hija de la naturaleza”. Se la suele comparar con poetisas tan importantes como la chilena Gabriela Mistral o la argentina Alfonsina Storni.

En 1932 inspiró un concurso internacional por el que se creó la Bandera de la Hispanidad.

Murió en Montevideo el 15 de julio de 1979 con 87 años.

                                                                                    Maximiliano Reimondi