AIRE

                          “Lancé una flecha al aire, cayó a la tierra pero no sé dónde” (Henry Wadsworth  Longfellow)                                                        

 

Hay un perfume en el aire

una suave quietud del viento

amenaza de que tus lágrimas inunden la tierra.

Se confunden con el abrazo

de los árboles

para hacer pedazos el reloj de tu horizonte.

 

Hay un perfume en el aire.

Ahora siento la pasión de tu pintura en mis venas.

Se excitan mis huesos

al ver tu alma desnuda.

El viento está quieto.

No siento ni escucho nada…

¿Estoy vivo?

 

                           Maximiliano Reimondi